El evento de belleza Miss Francia 2022 ha publicado las imágenes oficiales de las 29 aspirantes que competirán a principios de diciembre por llevarse la corona. Sin embargo, sus aspirantes están recibiendo opiniones y críticas del todo negativas por el uso de filtros y retoques que siguen por sus redes sociales.
Los filtros de Instagram y el manejo del Photoshop es algo que suelen seguir incontables celebrities, modelos e influencers internacionales. Especial mención a la polémica de Kylie Jenner y su abuso del Photoshop en redes, o los retoques de las más locales como María Pombo o incluso Rosalía en su última portada para People.
Que esto también ocurra en el caso de una aspirante a Miss parece perturbar a muchos usuarios. Algo tan cotidiano como un filtro ha llevado al debate en redes, y es que las participantes no parecen ni ellas en las fotos que suben a sus cuentas personales.
«Viva Photoshop. En las fotos oficiales, algunas de ellas son totalmente irreconocibles», ha comentado un usuario junto a una foto de Miss Córcega, Emma Renucci. «Chicos, créanme, ella no retoca ninguna de sus fotos. También hay que tener en cuenta el ángulo, la iluminación que cambian mucho», trató de defender otro.
Sin embargo, algunos puntos de vista han ido más allá y han criticado la referencia negativa que esto supone sobre el resto de jóvenes que siguen las pautas y estándares de belleza normativa aportada en las caras conocidas de las redes, añadiendo una imagen de Miss Alsacia, la aspirante Cécile Wolfrom: «Se ve muy bien en la foto oficial. Pero lo que hacen en su Instagram no es bueno para los jóvenes que se dejan impresionar fácilmente».
Frente a estas críticas, ha sido la misma Sylvie Tellier, Miss Francia 2002, directora nacional del certamen actualmente, quien aceptó la idea de que las fotos en redes sociales suelen retocarse, pero advirtió a las aspirantes que no abusaran de ello. «Todo el mundo se hace selfies, se gusta. Pero también les digo a las chicas que tengan cuidado. La perfección puede ser aburrida».
Haciendo mención de las palabras de la actual Miss Francia, Amandine Petitla directora ha repetido su mensaje: «Ella les decía: ¡Chicas, tengan cuidado, están en el concurso de Miss Francia, no en el concurso de Instagram! Al editar demasiado, corren el riesgo de generar reacciones decepcionantes cuando se adentren en la aventura de Miss Francia».
Sin embargo, es la búsqueda de una perfección lo que sostiene a un concurso que, desde hace tiempo, va perdiendo su propósito por un sobrepeso de críticas cuya organización no ayuda a evitar. Ya se presentaba recientemente la demanda retratada por la organización Osez le Fémenisme.
«Nuestro objetivo es que la productora afronte sus responsabilidades y corrija un reglamento profundamente sexista y retrógrado. Y que respete el derecho laboral. Las candidatas están explotadas, la sociedad saca enormes beneficios, pero no reconoce la relación laboral y además discrimina», han apuntado.
Ya lo criticaba la organización feminista entonces: «Es un símbolo que representa todas las imposiciones sobre la apariencia pública de las mujeres». Algo que se extrapola más allá con el uso de los filtros.
Miss Francia continúa siendo un programa muy visualizado, con un total de 8,6 millones de espectadores en la final de Miss France 2021, mejor resultado desde 2006. Por el momento, ya se ha pedido que el concurso “suprima de su reglamento todas las cláusulas sexistas, pague a las mujeres y deje de practicar la discriminación».
